Los responsables de Fapar (Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Aragón) en la provincia de Teruel han llamado la atención sobre las deficiencias detectadas en los colegios de la provincia, cuya reparación depende de los ayuntamientos. Consideran que le nuevo Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local abre una oportunidad a los pequeños consistorios de la provincia para que se hagan cargo de estas actuaciones.
Los ayuntamientos son los que ceden solar para edificio y son los encargados del mantenimiento, explico Mª José Izquierdo. “Los pequeños arreglos que hay que hacer se dejan durante mucho tiempo, a veces por dejadez o por falta de interés y al final lo que es una pequeña inversión se convierte en un problema grave. Entonces la actuación pasa al Departamento de Educación, que asume la responsabilidad y llega un momento que el presupuesto es más reducido y no ha dinero para estos arreglos”.
Mª José Izquierdo puso como ejemplo los casos del tejado del colegio de Valjunquera, los baños del de Monroyo, los accesos al de Mosqueruela o el colegio Ricardo mallén de Calamocha donde hay problemas de pintura según indicó.
“Hemos valorado lo que viene en el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local y hemos visto que los ayuntamientos pueden solicitar ayudas para educación, esplicó.
Según Izquierdo, ahí se puede incluir la mejora de los centros educativos. “Los recursos que van a los ayuntamientos se puede utilizar para estas reparaciones”, consideró.
Destacó que el real decreto que se publicó el 26 de octubre en el BOE, establece además que podrán financiarse gastos corrientes vinculados a programas de actuación en el ámbito educativo y hasta un montante equivalente al 20 por cierto de los fondos que correspondan a cada Ayuntamiento. Los Ayuntamientos cuya población no supere los 2.000 habitantes, podrán, además, realizar con cargo a este Fondo contratos que tengan por objeto obras de mejora de las redes varias y de adecuación, rehabilitación o regeneración de entornos y espacios públicos urbanos.
Las APAs son las que hacen llegar las deficiencias de los centros educativos a Fapar pensando que su reparación le corresponde a Educación. Esta situación se repite año tras año, pero reconoció que hay ayuntamientos pequeños que no pueden hacerse cargo de estas actuaciones y que ahora tienen la oportunidad de acometerlas con la convocatoria del Fondo Estatal, cuyo plazo de presentación de solicitudes concluye a finales de enero.
Los ayuntamientos son los que ceden solar para edificio y son los encargados del mantenimiento, explico Mª José Izquierdo. “Los pequeños arreglos que hay que hacer se dejan durante mucho tiempo, a veces por dejadez o por falta de interés y al final lo que es una pequeña inversión se convierte en un problema grave. Entonces la actuación pasa al Departamento de Educación, que asume la responsabilidad y llega un momento que el presupuesto es más reducido y no ha dinero para estos arreglos”.
Mª José Izquierdo puso como ejemplo los casos del tejado del colegio de Valjunquera, los baños del de Monroyo, los accesos al de Mosqueruela o el colegio Ricardo mallén de Calamocha donde hay problemas de pintura según indicó.
“Hemos valorado lo que viene en el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local y hemos visto que los ayuntamientos pueden solicitar ayudas para educación, esplicó.
Según Izquierdo, ahí se puede incluir la mejora de los centros educativos. “Los recursos que van a los ayuntamientos se puede utilizar para estas reparaciones”, consideró.
Destacó que el real decreto que se publicó el 26 de octubre en el BOE, establece además que podrán financiarse gastos corrientes vinculados a programas de actuación en el ámbito educativo y hasta un montante equivalente al 20 por cierto de los fondos que correspondan a cada Ayuntamiento. Los Ayuntamientos cuya población no supere los 2.000 habitantes, podrán, además, realizar con cargo a este Fondo contratos que tengan por objeto obras de mejora de las redes varias y de adecuación, rehabilitación o regeneración de entornos y espacios públicos urbanos.
Las APAs son las que hacen llegar las deficiencias de los centros educativos a Fapar pensando que su reparación le corresponde a Educación. Esta situación se repite año tras año, pero reconoció que hay ayuntamientos pequeños que no pueden hacerse cargo de estas actuaciones y que ahora tienen la oportunidad de acometerlas con la convocatoria del Fondo Estatal, cuyo plazo de presentación de solicitudes concluye a finales de enero.
Fuente: Diario de Teruel 21 diciembre 2009
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